Los Futbolísimos - El misterio del robo imposible

Una exposición del antiguo Egipto va a realizarse en el pueblo, Sevilla la Chica, todo el mundo está expandiendo la noticia.

Era un día por la mañana, estaban todos en la puerta del colegio cuando vieron venir al director. Estos se asustaron, ya que no sabían lo que podría ser.

Había un problema, y gordo, el equipo de fútbol del Soto Alto podía llegar a desaparecer a causa de los pocos fondos del colegio. No tenían dinero para pagar a los árbitros, ni para el material deportivo, ni para el cuidado del césped, ni para un entrenador, etc.

El director Esteban les propone que, si ellos estaban de acuerdo, podría ir a hablar con las Virtudes, unas mujeres de edad avanzada que dirigían una tienda de deportes, muy serias y desagradables. Las Virtudes odian a los niños, y el fútbol, pero por algún motivo, el director consiguió convencerlas e hicieron un trato con las siguientes reglas:

1- El equipo pasaría de llamarse Soto Alto a "Deportes Moncayo", el nombre de la tienda.

2- La equipación llevaría el logo de Deportes Moncayo.

3- Si acababan últimos en la clasificación de la liga, dejarían de ayudarlos.

4- Montarían una tienda en el interior del colegio.

Pasaron los días, y llegó una nueva y buena noticia al club, tenían un nuevo entrenador, Morley, un hombre con un largo pelo pelirrojo, que siempre iba en manga corta.

Este era escocés, y ya había ganado varios torneos internacionales con muchos equipos. Tenía una hija llamada Greta, con muchas pecas por todo el cuerpo, pelirroja, y con unos ojos verdes enormes, y además se le daba genial el fútbol. Había batido el récord de toques con el balón, más de cien toques seguidos.

Llegaron los primeros días de entrenamiento tras el torneo de Navidad. Morley les dijo que no iban a tocar el balón, que estaba prohibido, lo único que harían serían mudanzas. Al principio esto resultó un tanto extraño a los chicos, ya que no estaban para nada acostumbrados.

Pasaron así una semana entera, entrenando a base de mudanzas. Hasta que Camuñas, el portero del equipo, se hartó y se lo contó a su padre. Este convocó una reunión de padres y madres, junto a el director, en el que se discutiría el futuro de Morley.

Una vez finalizada la reunión, los chicos fueron corriendo a informarse sobre todo lo que habían estado hablando. Al parecer Morley dejaría de ser su entrenador, y en su lugar entraría el padre de Camuñas. Todos se quedaron pensando, y vieron que el nuevo entrenador no tenía ni idea de cómo dirigir un equipo y para colmo, como no ganasen uno de los tres partidos que quedaban, el Soto Alto, o mejor dicho, el Deportes Moncayo desaparecería por completo.

Este libro está genial, son muy divertidos y entretenidos, aunque no os guste el fútbol, este libro os encantará, ya que incluye muchas ilustraciones muy bien hechas. Es un libro más o menos largo, pero que se te hace corto al leerlo.