Harry y las pócimas (continuamos la historia)

Al cabo de diez horas, terminaron la pócima, pero a Ron le salió mal, aunque nadie lo sabía. Fueron todos a la cama y la poción empezó a burbujear. De repente, salió un fantasma que le arrebató el alma a Hermione. Al despertarse, vieron a Hermione pálida y con muy poca sangre.

Llamaron rápido al profesor de magia y dijo:
- Habéis invocado al, ¡Spectrus Almerus!
- ¿Con qué hechizo le podremos vencer?- preguntó Ron asustado.
- Con el...
Justo en ese instante, vino el espectro y le arrebató el alma, igual que Hermione.

Los cinco adolescentes que quedaban, incluyendo a Harry y a Ron, buscaron como locos libros en la biblioteca, hasta que encontraron el que necesitaban. Se llamaba Mirisis Minflori.

En el libro estaba escrito que para vencerlo tenían que hacer una pócima nueva con los mismos ingredientes que la otra, pero con diferente elaboración. Lo hicieron todos y a Ron le salió bien por primera vez, después de hacerlo mal la primera vez. Cogieron la pócima y fueron a por él, pero Ron se quedó en la sala de pócimas haciendo más.

Samford, el más fuerte del grupo, vio al espectro y le lanzó la pócima, pero falló. Ron hizo tres más, se las lanzaron a la vez y el fantasma desapareció.
Luego, con otra pócima que estaba escrita en el libro, curaron a Hermione y al profesor de pócimas.

A Ron le tocó el día de buena suerte, así que, se compró la lotería, pero no le tocó, sino que le detenieron por pagar menos de lo que tenía que pagar. Fue andando hasta la autopista A-33 y, cuando iba a pasar un coche, se puso delante, pero el coche le atropelló y Ron perdió la pierna derecha y el brazo izquierdo.

El médico le dijo:
- Has tenido muy mala suerte, Ron.
- Mentira, mi profesor me ha dicho que hoy tenía un día de buena suerte.- contestó.
- Bueno, allá tú.

Ron subió al Everest y se tiró, pero como ya pensáis todos, no le salió muy bien.

THE END