Había un profesor famoso por sus castigos y mal carácter, que se llamaba D. Emilio.
En ciertas ocasiones por no traer los deberes hechos, en otras por llegar tarde a clase, por hablar entre los compañeros, por no saberse la lección, o porque tuviera un mal día, administraba sus castigos sin piedad.
Por ejemplo, colocaba a los niños de cuclillas apoyados en la mesa, y les golpeaba en el culo con su varita de madera, a otros los ponía con los brazos en cruz y en cada mano un par de libros gordos.
Tenía en su cabeza tres pelos de un lado a otro de la cabeza, y se reían de él diciendo:
-¿Qué es el viento?
-Los pelos de D. Emilio en movimiento.
Está muy bien, pero quizá hubiera estado mejor añadiéndole más información antes de las anécdotas, ten en cuenta que es una investigación histórica.
ResponderEliminarPero eso sí, está muy bien redactado.